Cuando llega el buen tiempo, el salón deja de ser el centro de nuestro hogar y nos desplazamos a la terraza. Salimos al exterior y queremos generar un ambiente lo más acogedor posible, combinando plantas, mobiliario e iluminación para comer relajadamente, disfrutar de las noches apacibles y pasar tardes entretenidas con nuestros familiares y amigos. Por este motivo, el toldo para terraza se convierte en un elemento imprescindible para protegerte del sol, evitar la radicación solar, aprovechar todo el espacio destinado a la terraza exterior y, en definitiva, estar mucho más cómodo y que tú y toda tu familia ganéis en confort y comodidad mientras dure el buen tiempo, sobretodo en verano.
¿Qué tipo de toldo elegir?
Es una pregunta muy habitual, quizás la más recurrente entre las familias y empresas que necesitan instalar un toldo en su vivienda o negocio.
Los principales tipos de toldo para terraza son:
- Toldo cofre. Protege al completo tanto la lona del toldo como los brazos extensibles.
- Toldo semicofre. Cuando haga mal tiempo, la lona de tela se protege en un cofre.
- Toldo de brazo invisible. Cuando el toldo se eleva, su lona y sus brazos quedan al aire libre.
- Toldo con faldón. Protege frente a la radicación solar y de los edificios que haya enfrente.
¿Por qué motorizar tu toldo?
¿Tienes en casa un toldo que se despliega o recoge con una manivela? Con una manivela a la que todo el día ha incidido el sol, dándole vueltas a temperaturas de 35º durante el verano, que además se bloquea o se sale con demasiada frecuencia, ¡tienes que instalarte un toldo motorizado sin esperar más!
¿Tienes instalado un toldo de brazo invisible, un toldo cofre, un toldo de punto recto o un toldo de telón? No importa, no es necesario que lo cambies, los sistemas de motorización más modernos son muy fáciles de integrar e instalar, tanto en toldos nuevos como en toldos ya instalados hace años.
Abandona las engorrosas manivelas e instálate un toldo eléctrico: se acciona fácilmente con un mando a distancia y ahora también cómodamente desde una tableta digital o tu propio teléfono smartphone. En segundos el toldo se baja a la altura que necesitas y ya puedes ajustar y disfrutar de la sombra o la luz solar ideales para tu terraza. La lona queda perfectamente tensada, sin ondulaciones, facilitando su mantenimiento y extendiendo su durabilidad. El propio toldo dura más tiempo, con una apertura y extensión, o un cierre y recogimiento, mucho más suaves, continuos y regulares. Y además, puedes integrar todo el sistema en la domócita del hogar, aumentando todavía más la comodidad y la tranquilidad.
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