Las persianas son un elemento imprescindible en nuestros hogares. A menudo pasan desapercibidas y no les prestamos la atención que se merecen.
Lo cierto es que gracias a ellas podemos regular la luz que entra por nuestras ventanas, nos aíslan del frío y del viento y nos proporcionan intimidad.
En el post de hoy te contamos algunos trucos para limpiar y realizar un buen mantenimiento de nuestras persianas.
¿Con qué frecuencia debemos limpiar las persianas?
Las persianas están totalmente expuestas a las inclemencias del tiempo, por lo que, sobretodo en la parte exterior, acumulan bastante suciedad.
Barro por las lluvias, polvo, insectos… es lo que suele manchar las persianas, por ello su limpieza debe estar dentro de nuestros planes de limpieza habituales y ponerlas a punto al menos una vez al mes.
Podemos aprovechar el momento en el que limpiamos a fondo los cristales para limpiar también las persianas.
Pasos a seguir para conseguir unas persianas perfectas
1-Quitar el exceso de polvo
Si tenemos aspiradora, ésta puede ser una gran aliada a la hora de dejar nuestras persianas como nuevas.
Si observamos que se ha acumulado mucho polvo, podemos aspirarlas para eliminar la mayor cantidad posible.
Si no disponemos de aspiradora, el plumero también nos hará un buen papel a la hora de eliminar el exceso de polvo acumulado en las lamas de nuestras persianas.
2-Lavar las persianas
Una vez hemos quitado el polvo, llega el momento de lavarlas más a fondo.
Podemos realizar esta limpieza de distintas formas, bien con el típico limpiador multiusos y un trapo, intentando frotar bien lama por lama para eliminar toda la suciedad.
O bien con agua templada, jabón y una esponja. Aquí sería recomendable pasar la esponja y después ir secando con un trapo para conseguir un acabado perfecto.
3- Desmontarlas y a la bañera
Si tus persianas se pueden desmontar, lo más sencillo para limpiarlas en profundidad es hacerlo y llevarlas a la bañera.
Una vez allí, podrás limpiarlas sin problema con jabón o detergente y enjuagarlas con agua.
Si tus persianas son de madera, no es preciso que busques productos para poder limpiar de forma extraordinaria tu persiana.
Tan solo necesitarás un producto especial para el parquet y proceder a pasarle un poco de éste por medio de un trapo un poco humedecido.
Trucos de limpieza según de qué material estén hechas
Obviamente no todas las persianas son iguales, de hecho es un elemento muy versátil en cuanto al material del que están fabricadas, habiendo persianas de madera, de alumino o de PVC.
1- Persianas de madera.
El primer paso es el mismo, sea cual sea el material del que están hechas nuestras persianas. Hay que eliminar el polvo que se haya podido acumular.
Una vez quitado el polvo, llenaremos un barreño con agua tibia, no necesitaremos ningún producto ya que los agentes químicos pueden dañar la madera, a no ser que compremos un producto especial para este material.
El agua también puede hacer que la madera se hinche, así que hay que escurrir muy bien el trapo y después secar con otro trapo seco.
Una vez limpias, podemos utilizar un poco de agua con aceite de oliva para darles brillo y nuestras persianas quedarán perfectas.
2- Persianas de PVC
Es uno de los materiales más utilizados en la fabricación de persianas dado su resistencia, además es fácil de limpiar y de mantener.
Al igual que con los anteriores materiales, hay que comenzar eliminando la suciedad superficial, bien con una aspiradora o bien con un plumero.
Con un poco de agua y jabón podremos limpiar más en profundidad, deteniéndonos lama por lama para dejarlas perfectas.
Luego podemos darles una última pasada con un limpiador específico que dejará las persianas como nuevas.
3- Persianas de aluminio
Comenzamos por eliminar el polvo acumulado.
Después podemos lavarlas bien con un limpiador multiusos o bien con un barreño con agua tibia al que añadiremos un poco de jabón o detergente.
Así que ya sabes, las persianas hay que cuidarlas y limpiarlas con cierta frecuencia para que sigan cumpliendo con la importante función que desempeñan.
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