A medida que las temperaturas bajan, es menos probable que los propietarios pasen tiempo al aire libre bajo sus toldos. Pero, ¿qué ocurre con los toldos que se dejan desatendidos durante el crudo invierno? La nieve, el hielo y los fuertes vientos pueden dañar sus toldos si no tiene el equipo adecuado. Aquí hay algunos tipos diferentes de toldos y algunas cosas que se pueden hacer para prepararlos para los meses de invierno que aumentarán la vida de su toldo.
Toldos retráctiles de tela enrollable abierta:
Una funda de invierno de vinilo suave es la mejor para este tipo de toldo. La cubierta, sin una capucha metálica, no solo cubre la tela, sino que también cubre el motor, los brazos, la barra delantera y la cenefa. Únicamente el tubo cuadrado y los soportes de instalación quedarán expuestos. La cubierta se instala fácilmente deslizando la cubierta sobre el rollo de tela. La cubierta se mantiene en su lugar mediante el uso de «bridas» a través de la arandela en la parte delantera y la arandela correspondiente en la parte posterior.
Toldos retráctiles estilo cassette:
Este estilo de toldos tienen una carcasa metálica completa, que se denomina «cassette», que protege la tela cuando se retrae. Hay dos características especiales que aseguran esta protección. A medida que el toldo se retrae, los últimos centímetros de tela levantan los brazos, permitiendo que la barra frontal del toldo se apriete fuertemente contra el «cassette» de metal.
Toldo de rollo abierto con capota de metal:
Existen pros y contras para este tipo de toldo, dependiendo de su región geográfica y el tono de su toldo. En áreas de clima frío que reciben nieve, no se recomienda que los propietarios compren capuchas de metal para toldos retráctiles. La campana de metal se encuentra unos centímetros por encima del rollo de tela y la nieve puede quedar atrapada entre el rollo de tela y la campana. Esto derrota el propósito de la campana. Si su toldo tiene un paso, entonces la abertura podría hacerse unos centímetros más grande. Para abordar estos problemas, tiene dos opciones: puede quitar la cenefa o puede comprar una cubierta e instalarla debajo de la capucha.
En la provincia de Alicante encontraremos desde los climas más gélidos del interior en poblaciones como Alcoy, Villena, Elda o Castalla, en las que es habitual ver nevar en invierno, como los climas más templados de la costa mediterránea como en San Juan, Campello, Santa Pola, Villajoyosa o Benidorm, en los que en invierno es más probable que llueva o que algunos días sople un fuerte viento. Sea cual sea su domicilio es importante que tome las medidas oportunas para que sus toldos estén seguros y protegidos frente a las inclemencias del tiempo. Nosotros le ayudaremos con el mantenimiento y prevención de su toldo para protegerlo del invierno. No dude en consultarnos desde aquí para que le realicemos un presupuesto de mantenimiento sin compromiso.
Trackbacks/Pingbacks