La motorización de un toldo enrollable, o sistema de protección solar, consiste en un elemento tubular, insertado en el carrete del propio toldo, que nos facilita y ahorra la tarea de extender el toldo o recogerlo a mano. Extender el toldo a mano, o recogerlo, una tarea cotidiana que se vuelve tediosa si tienes varios toldos que recoger o en personas de avanza edad.
La motorización de toldos se ha popularizado por el auge de la domótica en las casas, y la bajada generalizada de los precios, tanto en los motores como en los sensores de automatismo. Es indudable la comodidad que supone accionar el mecanismo a través de un mando a distancia. Y ahora también es posible gestionar el automatismo de seguridad, con distintos sensores, desde tu propio móvil, smartphone o tablet.
Los toldos motorizados, con un motor eléctrico, se pueden instalar en toldos para terrazas, toldos conrrederos, toldos con cofre y toldos para ventanas.
Ventajas de los toldos motorizados
- Facilidad de manejo y ajuste del toldo motorizado.
- Poder manejar varios toldos al mismo tiempo, con un solo aparato y un único clic.
- Sólo es necesario un punto de corriente.
- No requiere obra para instalar una nueva línea de corriente, casi nunca.
- No es necesario tirar líneas de corriente dentro de la casa, en la mayoría de los casos.
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Sensor de viento
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Sensor solar
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Sensor de lluvia
No es necesario levantarse cada vez para ajustar cada toldo, puede hacerse todo cómodamente desde el sofá.
Automatistmos para toldos. Sensores
El sensor de viento consiste en un anemómetro y es el elmento de seguridad más popular. Consiste en una veleta capaz de detectar la velocidad del viento y, según la configuración fijada, automatiza la recogida del toldo para evitar posibles daños o desperfectos a causa del viento.
El sensor de sol es capz de medir la cantidad de luminosidad de sol y, según el programa establecido, extenderá automáticamente el toldo. Este sensor te permitirá ahorrar en la energía consumida dentro de casa, manteniendo una temperatura constante y agradable, sin necesidad de recurrir al aire acondicionado o a la calefacción si fuera necesario.
El sensor para cuando llueve, o pluviómetro, mide la cantidad de lluvia que cae para evitar que el agua se estanque sobre la lona o la tela del toldo. Así evitarás posibles roturas o desprendimientos por el exceso de peso.
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